martes, 12 de julio de 2011

AGUJEROS NEGROS Y QUASARES

En la década de 1980, se desarrollaron modelos unificados en el que los cuásares fueron vistos como una clase de galaxias activas, y había emergido en un consenso general que en la mayoría de los casos era el ángulo de visión lo que distinguía unas clases de otras, como los blazars y las radiogalaxias. La luminosidad elevada de los quásares se creía que era el resultado de la fricción causada por el gas y el polvo cayendo en los discos de acrecimiento de agujeros negros supermasivos, que podían convertir un 10% de masa de un objeto en energía, a diferencia del 0,7% obtenido en procesos de fusión nuclear que dominan la producción de energía en estrellas solares.
Este mecanismo también se cree que explica por qué los quásares eran más comunes al comienzo del universo, ya que esta producción de energía finaliza cuando el agujero negro supermasivo consume todo el gas y polvo que tiene cerca. Esto significa que es posible que la mayoría de las galaxias, incluyendo la Vía Láctea, ha pasado a través de una etapa activa, apareciendo como un quásar u otra clase de galaxia activa dependiente de la masa del agujero negro y la rotación de acrecimiento, y que son inactivos ahora debido a la falta de materia para alimentar sus agujeros negros centrales que generan la radiación.
De forma sencilla,se puede decir que cuando un agujero negro ya no admite más energía o masa,el  gas que sobra sale  y forma los quáseres.
Los agujeros negros  pudieran ser  atajos  del espacio y el tiempo y se supone que hay uno de ellos en el centro de las galáxias,incluida la Vía Láctea.
Cuando nos enseñaros    que “polvo eres y en polvo te conventirás”,es lo que los científicos ahora están descubriendo: Las estrellas nacen del  polvo de estrellas,y cuando  se extingen,vuelven a nacer   del polvo que han generado en su  propia extinción.
Tendrían que habernos dicho:
“Polvo de estrellas sois y en polvo de estrellas os convertiréis,después de haber sido estrellas fulgurantes”

LA VIA LACTEA


.- Constelación de la Vía Láctea
   (El Camino de Santiago)
Es la galaxia que contiene al Sol y al sistema solar donde nos encontramos. Podemos verla en las noches oscuras, de aspecto lechoso (de ahí su nombre) cruzando el cielo   una ancha banda formada por millones de estrellas.
Claramente visible, expectacular y majestuosa.Para los antiguos Griegos esa masa blanquecina visible en las noches claras, que hoy llamamos Vía Láctea, era la leche derramada de los pechos de Hera, la madre de todos los dioses.
En esta pintura  del año 1582 ,   Jacopo Tintoretto recrea el mito griego con Hera amamantando y como las estrellas manan de sus pechos

National Gallery, Londres

La Vía Láctea, es una galaxia de dimensiones enormes, en forma de disco en espiral, con diversos brazos que se unen en espiral en la protuberancia del centro, con unos 100.000 años luz de diámetro.
Medidas de la radiación del centro sugieren la presencia de restos de explosiones de estrellas o de un enorme agujero negro.
El Sol, en todo su explendor, es solo una insignificante estrella  más del billón aproximado que componen la Vía Láctea.
Un rayo de luz viajando a 300.000 Km/s. tardaría unos 400.000 años en atravesar la Vía Láctea. El Sol se encuentra a unos 30.000 a.l. del centro de la galaxia.
La Vía Láctea, a su vez, es solo una más de las muchas galaxias conocidas, algunas (Quasar) situadas a distancias tan increibles como miles de millones de años luz, de nuestro planeta.
Los Quasar se descubrieron gracias al uso de radio-telescopios a partir de 1950, un Quasar a 12.000 millones de años luz se descubrió en 1991.
El astrónomo norte-americano Edwin Hubbe, descubrió que las otras galaxias se alejan de la Vía Láctea, lo cual indica que el universo se encuentra en continuo movimiento de expansión. Este movimiento fué inicialmente causado por la  explosión de una gran masa de materia extremadamente densa y caliente.
Lo que se conoce como el "Big Bang" o La Gran Explosión